ya no son olas feroces,
ni chispas arrebatadas,
son alas dormidas con
cansancio en las venas.
Un rayo de luz, corta la noche,
abre los cielos, despierta las aves,
alimenta mi cuerpo y me trae a la vida.
Es el minuto cero, cuando estoy entre
Morfeo y Helios, cuando siento la vida
que es fuego en mi sangre,
es el segundo perfecto cuando Dios me
bendice con una gota de Espíritu.
Y aunque cada día ocurre lo mismo,
no dejo de sentir la bendición,...el asombro,
de que me quiera tanto, me llame suya
y me de un día más bajo su manto.
The still waters change,
ferocious waves no more,
excited drops no more,
sleepy wings
with laziness in the veins.
A ray of light cuts the night,
open up the skies, wakes the birds,
feeds my body and brings me to life.
It is minute zero, in between
Morpheus and Helios, when I feel life
that is fire in my blood,
It is the perfect second, when God
blesses me with a drop of Spirit.
Although everyday is the same,
I can´t stop feeling the blessing,
the awe of being loved such,
being called His, and given the present of another day under His wing.
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